Valentina Castro , la colombiana que hacía trenzas en Tumaco y hoy desfila para Louis Vuitton

Hace apenas un año, Valentina Castro Rojas, conocida en el barrio Ciudadela de Tumaco, Colombia, por su talento para trenzar el cabello afro, era una joven desconocida en el mundo del modelaje. Con su estatura de 1 metro y 75 centímetros, había llamado la atención en algunos eventos locales, pero nadie imaginaba que llegaría a desfilar para una marca de lujo global.

Valentina, de 18 años, solía ganar entre $4 y $12 por peinado en su barrio. Sin embargo, todo cambió cuando un cazatalentos de una agencia de modelos dominicana la descubrió a través de Instagram. El mensaje cambió su vida, llevándola de su rutina en Tumaco a las pasarelas internacionales.

La joven pasó de trenzar cabello en su casa a lucir atuendos de miles de dólares en desfiles en lugares emblemáticos como el Museo de Orsay en París. Después de viajar por Europa, regresó a Tumaco y sigue cursando su último año de bachillerato mientras estudia inglés en línea.

Tumaco, una ciudad costera de Colombia, con una población de alrededor de 250 mil habitantes, ha enfrentado desafíos como la pobreza y la violencia. Valentina describe su barrio como “pacífico” a pesar de estas dificultades.

Su incursión en el modelaje comenzó cuando un cazatalentos la contactó debido a su cuenta de Instagram donde compartía peinados. Aunque inicialmente dudaba debido a posibles estafas, Valentina aceptó la propuesta después de consultar con su madre.

Su debut fue en el desfile de otoño-invierno de Louis Vuitton en París. A pesar de su inexperiencia, Valentina se enfrentó al desafío de ser una modelo internacional. Aunque tuvo que adaptarse a una nueva dieta y estilo de vida, su determinación la llevó a desfilar en varias ocasiones y trabajar exclusivamente con Louis Vuitton.

Valentina también busca inspirar a otras jóvenes de su comunidad. Aunque no promueve la idea de ser modelo a todas, ha colaborado con su agencia para buscar nuevos talentos en Tumaco.

A pesar de su éxito en las pasarelas, Valentina sueña con ser peluquera y tener su propia peluquería. Además, celebra su cabello afro, que considera una parte esencial de su identidad y un símbolo de representación.

El camino de Valentina desde su barrio en Tumaco hasta las glamurosas pasarelas del mundo es una inspiradora historia de superación y logros inesperados.